El Ayuntamiento de Granada ha impuesto una sanción de 1.500 euros a la empresa concesionaria del tren turístico que unirá la Alhambra con la ciudad por incumplimiento del contrato en cuanto a la puesta en marcha de este servicio, que estaba previsto que empezara a funcionar el pasado mes de septiembre.
La tardanza del fabricante de este medio de transporte, que será único en Europa por la peculiaridad de que funcionará con un motor híbrido, ha motivado el retraso, ha explicado hoy en rueda de prensa el portavoz del equipo de gobierno, Juan García Montero (PP).
El Ayuntamiento espera que el tren, que tenía previsto empezar a funcionar a mediados del pasado mes de septiembre, entre en funcionamiento no más tarde de mediados del próximo diciembre.
El retraso ha llevado al Ayuntamiento a imponer a la concesionaria, una Unión Temporal de Empresas (UTE) integrada por Autocares Juliá Travel SA y Tren Progresa SL, una sanción de 1.500 euros a razón de 375 euros por cada uno de los cuatro vehículos que conformarán el tren.
El concejal, que ha reclamado a la empresa la puesta en marcha del tren turístico “en el menor tiempo posible”, ha explicado que cuando se trata de concesiones de este tipo, el procedimiento administrativo está “muy reglado” y hay que cumplir “estrictamente” con lo pactado.
El tren, de corte vanguardista, constará de cuatro vehículos híbridos de dos vagones con capacidad para 30 personas cada uno.
El hecho de funcionar con motor híbrido permitirá una reducción de gases del 40 % con respecto a los convencionales.