El Juzgado de Instrucción número 2 de Granada ha acordado el sobreseimiento libre y archivo de las diligencias previas que abrió a raíz del hallazgo de restos óseos humanos con signos de violencia junto con casquillos de armas en cinco fosas comunes de un barranco del término de Víznar.
Dicho hallazgo fue trasladado a la Justicia por la Junta de Andalucía tras las catas arqueológicas llevadas a cabo esta pasado verano en el referido barranco, a varios centenares de metros del entorno que ya fue excavado sin éxito en el 2009 y en el que algunos investigadores situaron el enterramiento de Federico García Lorca.
Aunque esta intervención promovida por el Ayuntamiento de Víznar estaba desvinculada de la figura del poeta granadino, la Dirección General de Memoria Democrática ha reconocido en varias ocasiones el carácter “simbólico” de dicho emplazamiento.
También destacaron que se trataba de la primera vez que un “Estado democrático”, en alusión al Gobierno andaluz, ponía en conocimiento de la Justicia el hallazgo de evidencias de posibles crímenes durante la Guerra Civil y el franquismo.
Para decretar el archivo de las diligencias, contra el que cabe recurso de reforma o apelación y en el que se indica que existe “expresa reserva” de acciones civiles o administrativas a favor de los perjudicados, el juzgado comparte fundamentalmente el criterio defendido en este caso por la Fiscalía.
Según consta en la resolución judicial, a la que ha tenido acceso Efe, el Ministerio Público interesó el archivo de las diligencias al argumentar que los hechos no eran constitutivos de delito “en base a los principios de legalidad e interdicción de la retroactividad de las normas procesales” y la Ley de Amnistía de 1977.
Aunque el Juzgado parte del presupuesto “esencial” de que no existe género de duda respecto al derecho de las víctimas de la Guerra Civil a un “resarcimiento moral” con la localización de los restos de sus familiares, recuerda que es la Administración pública y no el ámbito judicial a quien se atribuye la apertura de las fosas.
Además, argumenta la resolución, la investigación judicial de los hechos a los que se refería la denuncia interpuesta estarían legalmente “prescritos”.
El equipo de trabajo encontró en Víznar restos óseos y muestras del uso de armas de fuego en cinco de las once zonas en las que se intervino.
Los responsables del trabajo de campo no quisieron concretar una cifra de las personas que pudieron ser fusiladas en el barranco de Víznar, fundamentalmente en los primeros días de la Guerra Civil, aunque hay historiadores que hablan de hasta unas 2.000.