El movimiento Stop Desahucios volverá a protestar esta mañana a las puertas de la entidad Cajamar en el centro de Granada para pedir una solución para las 12 familias que viven en la conocida ya como “Corrala Triunfo”. Se trata de un edifico no terminado en la calle Cardenal Mendoza. Llevaba cinco años abandonado y ahora ha sido ocupado desde hace semanas por estas familias sobre las que pesa una orden de desahucios que se ejecutará el próximo día 28.
Ayer domingo, casi 300 personas convocadas por el grupo Stop Desahucios del 15M participaron en la presentación pública de la primera “corrala de vecinos y vecinas en Granada que nace amenazada de desahucio”, según informó el propio movimiento social.
En el edificio empezó a vivir hace meses Cristóbal Navarrete, un joven sin recursos económicos. Fue denunciado por Cajamar, y la entidad mostró disposición a negociar tras una acción de Stop Desahucios, pero no se llegó a concretar ninguna solución.
Según un comunicado de Stop Desahucios”, “debido a la terrible emergencia habitacional que se vive en Granada, el vecindario realojado en el edificio, hasta llegar a formar las 12 familias, con 23 personas (ocho de ellas menores de edad), que viven actualmente en la que se ha denominado como Corrala El Triunfo. La inmensa mayoría de los miembros de estas familias se encuentran en situación de desempleo y perdieron su vivienda en régimen de alquiler en los últimos meses”.
Las casi 300 personas que han participado en el acto de este domingo se han congregado en primer lugar en los Jardines de El Triunfo, desde donde se han dirigido a la corrala. Allí, un portavoz ha leído un manifiesto. Según un comunicado de este grupo, “el comunicado hace referencia al derecho de la vivienda, recogido en diversas normas nacionales e internacionales y a pesar de ello constantemente pisoteado. Así mismo, ha explicado la situación de los vecinos y vecinas, y ha indicado que su intención es regularizar la situación con Cajamar a través de un alquiler social que permita la permanencia en el edificio. Posteriormente, los vecinos y vecinas han mostrado el interior de la corrala a toda aquella persona que ha querido verlo”.