Seis familias han logrado la dación en pago en Peligros en este año que termina
El servicio jurídico del Ayuntamiento proporciona asistencia legal, de forma gratuita, a quienes tienen problemas para pagar la hipoteca
Este 2013, seis familias de Peligros han firmado la dación en pago de sus casas con el banco. Las entidades que les dieron la hipoteca se quedan con la vivienda, pero cancelan unas deudas que tenían prácticamente de por vida. Lo han conseguido con una firme voluntad, y con la ayuda del servicio jurídico gratuito del Ayuntamiento, disponible toda la semana con cita previa. Norberto y Beatriz, Loli y Juan Ramón, son las dos últimas parejas que han firmado la dación en pago este mes de diciembre, cancelando deudas de 115.000 y 106.000 euros. “Ahora el futuro está abierto.” “Ahora tenemos todos los proyectos.” “Nuestro proyecto es vivir.” Son las frases que más repiten tras librarse de hipotecas de 27 y 30 años, que no podían pagar desde que se quedaron en paro.
La pérdida del empleo marca el inicio de los problemas para quienes han pasado, o se encuentran, en una situación similar. Beatriz recuerda cuando empezó a tomar cartas en el asunto: “Yo estaba todavía trabajando, pagábamos la hipoteca, pero como veía la situación que se nos venía, veía lo que le estaba pasando a la gente del alrededor… Vine al Ayuntamiento y el abogado me dijo que nos estaban engañando con una moratoria con la que pagábamos casi ochocientos euros”.
Su pareja, Norberto, había perdido su trabajo y había empleado hasta el finiquito en pagar la hipoteca. “Invertimos todo nuestro paro, el finiquito de 16.000 euros que me dieron, perdimos el coche… Todo para pagar la hipoteca. La hipoteca estaba pagada pero el frigorífico estaba vacío. Decidimos dejar de pagar; total, íbamos a perder la casa. Al menos comíamos y vivíamos”, explica Norberto, encofrador durante los años de la burbuja inmobiliaria, que desmiente a quienes piensa que las daciones en pago generalizarán los impagos de cuotas: “Los españoles estamos concienciados a trabajar y pagar. El primer mes que no pagamos estuve una semana con un pellizco en el estómago, pensaba que era mala persona por no haber ingresado la cuota…”
. De no haber obtenido la dación en pago, habrían perdido la casa y mantendrían una deuda de por vida. “De cualquier nómina que ingresáramos nos iban a embargar todo lo que superara el salario mínimo interprofesional”, comenta Norberto, ilustrando la magnitud del problema al que se enfrentaban.
Loli y Juan Ramón, teleoperadora y electricista, también se dirigieron al banco en cuanto se quedaron en paro. “Les planteé la situación y les recordé que teníamos un seguro de 12.000 euros de protección de pagos, y me dijeron que duraba cinco años, algo que no venía en la escritura, y que se nos había cumplido el año anterior. Otro engaño. Entonces nos plantearon un periodo de carencia, pagar solo los intereses, pero no lo aceptamos porque, al terminar ese periodo, la deuda sería más grande. En junio Juan Ramón tuvo un accidente y volvimos a llamar, no se podía hacer nada. Hasta que recurrimos al Ayuntamiento. En el momento que fuimos con José Antonio –el abogado del Ayuntamiento-, en diez minutos estaba la solución encima de la mesa”, describe Loli, que ha cancelado 106.000 euros. “Ahora mismo estamos en el paro, pero podemos vivir. Mi hermana tenía un piso en Maracena que nos ha dejado por un año al menos”, añade.
“A quien esté en la misma situación, le decimos que luche, que sí se puede”, anima Loli. “Y a quienes ahora estén planteando una hipoteca, les diríamos que es un engaño, que alquilen”, apunta Norberto. A día de hoy, en Peligros se puede alquilar un piso de dos habitaciones por unos 300 euros.
Ayuda material y personal
Las dos familias destacan la ayuda que les ha prestado el Ayuntamiento, que ha ido más allá del servicio jurídico gratuito. En las negociaciones con las entidades financieras, es fundamental la implicación del alcalde y el resto de concejales, que realizan una mediación directa entre los bancos y las familias.
La ayuda ha incluido también asistencia material para la mudanza. “Si no fuera por eso, no estaríamos ahora como estamos”, comenta Juan Ramón. “El Ayuntamiento nos ha ayudado en todo y más. Nos ha acompañado hasta en la mudanza, y el abogado, como si fuera un amigo de toda la vida, preocupándose”, apostilla Norberto. “Y no solo el apoyo material, apoyo personal, que llames y te contesten, te tranquilicen y te estén acompañando”, añade Loli.
En opinión del concejal de Participación en el Ayuntamiento de Peligros, José Antonio Paniagua, que les recuerda a las familias que “el Ayuntamiento somos todos, es vuestra casa”, “es cuestión de voluntad, nosotros entendemos que es algo prioritario, y el problema es que en la mayoría de los sitios no se hace, y debería hacerse”. Para José Antonio Paniagua, la innovación está en la colaboración con las necesidades de las personas del pueblo. “Cuando entramos lo teníamos claro, esta tenía que ser la casa de todo el mundo, con las puertas abiertas”.
Así, dispusieron de una oficina de atención jurídica para los vecinos y las vecinas de Peligros con problemas para pagar la hipoteca. Un servicio que está disponible toda la semana en el Ayuntamiento, al que se accede con cita previa –que hay que solicitar a al secretaría de Alcaldía-. En coordinación con la Oficina Municipal de Información al Consumidor, el servicio jurídico ofrece, periódicamente, sesiones informativas en las que va actualizando los asuntos relacionados con los créditos hipotecarios: sentencias, jurisprudencia, nuevos recursos, opciones de presión asociativa…
Según José Antonio Cabrera, el abogado de este gabinete jurídico, en Peligros se están evitando casos extremos y dramáticos que se están produciendo en otras localidades, como los desahucios, por varios motivos: la asistencia jurídica gratuita, la implicación de los concejales y las concejalas, que dan la voz de alarma en cuanto tienen conocimiento de un caso, y la decisión firme de las familias afectadas. Esta coordinación hace posible afrontar los casos a tiempo de negociar con las entidades financieras. Dación en pago o refinanciación de la deuda -ampliación de años de hipoteca de forma que se pueda hacer frente al pago de las cuotas- son las dos principales soluciones que están evitando “auténticos dramas humanos que estamos viviendo en otros municipios”, en palabras del propio Cabrera.
Cláusulas abusivas
La negociación con las entidades financieras tiene un capítulo aparte con las cláusulas abusivas de los créditos hipotecarios. El servicio jurídico del Ayuntamiento y la Oficina Municipal de Información al Consumidor trabajan coordinados para ayudar a las familias a conseguir que el banco les elimine las cláusulas suelo y otras condiciones que los tribunales españoles y europeos están determinando como abusivas. “Ni todas las cláusulas son abusivas, ni todas las que son abusivas son reintegrables”, deja claro el abogado José Antonio Cabrera. En las distintas sesiones informativas que él mismo y la técnica de la OMIC, Katy Cortés, están ofreciendo, advierten a los afectados de que los reintegros se producirían solo desde el momento de la reclamación.
Las sentencias favorables que están dictando los distintos tribunales solo tienen efecto en los demandantes, en los casos particulares. Cada usuario tiene que poner una demanda al banco y esto, con las nuevas tasas judiciales, tiene un coste considerable -unos 2.000 euros por proceso-. Por eso, el gabinete jurídico del Ayuntamiento y la OMIC han propuesto a los afectados de Peligros, en primer lugar, agrupar las demandas por bancos: grupos de afectados de cada una de las principales entidades de Peligros que ponen una demanda común, y afrontar el coste de la demanda también en común. Si hay 20 afectados y el proceso cuesta 2.000 euros, cada afectado tendrá que aportar 100 euros.
Existen entidades financieras, como Caja Sur, que están eliminando las cláusulas suelo por sí mismas, ante las sentencias favorables a los afectados que están dictando los diferentes tribunales.
Reestructuración de la deuda
Tanto el servicio jurídico del Ayuntamiento, como los concejales del equipo de gobierno, insisten constantemente en la importancia de tomar partido en cuanto se empiezan a tener problemas para pagar la hipoteca, cuando todavía hay margen de maniobra con los bancos. Una de las opciones que tienen los afectados para mantener la vivienda es reestrucutrar la hipoteca hasta conseguir un importe de las cuotas mensuales que se pueda asumir. Hay casos que están pagando durante un año, o el periodo que sea, el índice Euribor más el 0,25%; esto es, 50 euros al mes. Esta solución da a los afectados un margen de tiempo para mejorar su situación. “La mayoría de los bancos la están aceptando”, explica José Antonio Cabrera. “En Peligros, cuando llega la familia, algún concejal ya ha llamado avisando del caso. Es una de las diferencias con otros pueblos, en los que estamos teniendo casos muy difíciles”, añade.
El lema ‘Sí se puede’ está muy presente en Peligros, en carteles que ya reciben en la entrada a la localidad, o que cuelgan del balcón del propio Ayuntamiento. Los últimos movimientos están demostrando que el ‘Sí se puede’ detener los desahucios, la dación en pago y los alquileres sociales cada vez es menos un lema y más una realidad.