Los familiares de los tres jóvenes que murieron en un accidente de tráfico en 2008 en Huétor Santillán han formalizado hoy un escrito en la Audiencia para que, a través del informe que este órgano debe emitir, mantenga su rechazo al indulto interesado por el conductor condenado por este siniestro.
Este nuevo paso se produce después de que el Tribunal Supremo estimara recientemente, de forma parcial, un recurso de estos familiares contra la medida de gracia otorgada por el Gobierno al conductor condenado y anulara el decreto por el que se le concedió.
El alto tribunal argumentó que el informe preceptivo para el referido indulto a Rafael H.G. fue emitido por un tribunal “equivocado”, ya que correspondía hacerlo a la Audiencia de Granada y no a la jueza de lo Penal número 2 de esa misma provincia, que había dictado la sentencia inicial del caso.
Por ello, ahora los familiares de los fallecidos, a través de su letrado Manuel Ocaña, ha registrado hoy mismo una petición formal a la Audiencia, a la que ha tenido acceso Efe, para que pida realmente nuevos informes y no “se conforme” con los ya aportados en el expediente del indulto que se remitieron en su día al Penal 2.
Para ello, se basa en dos razones fundamentales: que esos informes anteriores no serían “válidos” dado que los pidió un juzgado “incompetente” y que, para informar del indulto, habrá que atenerse a las nuevas circunstancias, elementos y extremos que presenta el condenado.
Esa parte, según ha informado a Efe Ocaña, también entiende que, al haber quedado anulado de momento el indulto, la Audiencia deberá pedir también al Juzgado de lo Penal que deje “sin efecto” la decisión de no ejecutar la pena de prisión impuesta al condenado y que acuerde, por tanto, su “inmediata” entrada en prisión.
El representante legal ha solicitado al tribunal provincial que pida una serie de informes, de los que ha tenido conocimiento y que no se aportaron en su día, que determinarían cómo el condenado habría tenido incidentes de naturaleza penal con la familia y otras personas de la localidad derivados del accidente.
En opinión del abogado, todo ello determinaría “sin lugar a dudas” su falta absoluta de arrepentimiento por los hechos.
El joven indultado fue condenado por el Juzgado de lo Penal 2 a dos años y medio de cárcel, en relación al accidente de tráfico que tuvo lugar en Huétor Santillán (Granada) en el verano de 2008, en el que murieron tres jóvenes en una carretera limitada a 40 kilómetros por hora en la que circulaba a más de 120.
Tras ser apelada esa sentencia, la Audiencia elevó la pena a tres años y tres meses de cárcel y el condenado solicitó el indulto.
El Ministerio de Justicia remitió el expediente al presidente de la Audiencia de Granada, pero desde esa instancia judicial, a quien correspondía emitir el informe preceptivo por haberse convertido en tribunal sentenciador al elevar la pena inicialmente impuesta, se reclamó de forma errónea el dictamen al Juzgado de lo Penal 2.
El Gobierno concedió el indulto parcial al conductor que conmutaba a Rafael H.G. la pena privativa de libertad por otra de dos años de prisión, quince días de trabajo en beneficio de la comunidad y un año de multa en cuotas diarias de dos euros, con lo que consiguió eludir entonces su entrada en prisión.