Científicos del Instituto del Agua de la Universidad de Granada, en colaboración con la Compañía Logística de Hidrocarburos CLH, diseñarán nuevos sistemas “bioabsorbentes” que permitan el tratamiento de las aguas con hidrocarburos y otros materiales orgánicos de un modo más eficiente.
El objetivo de este proyecto es el desarrollo de una nueva tecnología, basada en el diseño de nuevos sistemas bioabsorbentes, mediante la formación de lo que denominan un “biofilm”, que logre una elevada retención de los hidrocarburos y otros compuestos orgánicos de las aguas de proceso.
Se pretende diseñar así un sistema de limpieza más eficiente que sustituya al actual y que sea más sostenible y respetuoso con el medioambiente a través del uso combinado de técnicas físicas y biológicas, que permita sustituir a las actuales plantas de tratamiento, ha informado la institución académica.
El delegado del rector para Transferencia, Innovación y Empresa, Jesús Chamorro Martínez, ha firmado hoy junto a otros responsables universitarios el contrato de investigación con el director general de Tecnología e Innovación de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH), Basilio Navarro Sánchez.
La universidad ha recordado que la presencia de hidrocarburos en las aguas ocasiona daños de importancia con un efecto negativo en distintos ámbitos como la salud, la pesca y la acuicultura, el turismo, y en general en la industria local.
Algunos componentes del petróleo pueden acumularse a través de la cadena trófica y son perjudiciales a largo plazo tanto para organismos marinos como para sus predadores, incluido el hombre.
De ahí que sea necesaria la eliminación de dicho hidrocarburo en plantas de tratamiento específicas antes de su vertido final.
La empresa CLH dispone de estas plantas de tratamiento que funcionan mediante equipos físicos y químicos y que garantizan el cumplimiento estricto de la legislación vigente.
La mayoría de los hidrocarburos pueden ser degradados por los microorganismos autóctonos, por ello las técnicas de biorremediación son consideradas como alternativas eficaces para la degradación de estos contaminantes.
El Instituto del Agua de la Universidad de Granada y la empresa CLH se han propuesto mejorar los actuales sistemas de tratamiento de aguas residuales mediante el uso de procesos biológicos con el fin de realizar las operaciones de tratamiento de forma más eficiente, más económica y más sostenible con el medioambiente.
La aplicación de nutrientes o la inoculación de microorganismos en aguas supone serias dificultades, tanto de aplicación como de seguimiento, de la distribución de los productos añadidos.
Una solución a este problema es el uso de microorganismos adheridos a soportes inertes, formando “biofilms”, como los que se utilizarán en este nuevo proyecto de investigación.