El Centro de Planetas Menores de la Unión Astronómica Internacional ha reconocido así la labor de René Duffard y de Pablo Santos Sanz en el estudio de los cuerpos menores del Sistema Solar.
El pasado 12 de julio, una circular del Centro de Planetas Menores de la Unión Astronómica Internacional reconocía la labor de los investigadores del IAA-CSIC, René Duffard y Pablo Santos-Sanz, al nombrar dos asteroides en su honor.
Se trata de dos asteroides del cinturón principal, situado entre Marte y Júpiter, y que pasarán a denominarse (8797) Duffard y (9288) Santos-Sanz.
El Centro de Planetas Menores, que anunció el cambio de nombre en el congreso Asteroids, Comets & Meteors celebrado en Helsinki del 30 de junio al 4 de julio pasados, ha querido reconocer el trabajo de ambos investigadores en el estudio de los cuerpos menores del Sistema Solar (asteroides, cometas, centauros, objetos transneptunianos, etc).
René Duffard se licenció en astronomía por la Universidad Nacional de Córdoba (Argentina), y realizó sus primeros trabajos de investigación sobre atmósferas planetarias en el Observatorio Astronómico de Córdoba. Completó su doctorado en el Observatorio Nacional de Río de Janeiro (Brasil), con la tesis sobre pequeños cuerpos de nuestro Sistema Solar. En el año 2005 comenzó su primera estancia posdoctoral en el instituto Max Planck for Solar System Research (Alemania), colaborando en la cámara de imágenes de la misión DAWN, que se encuentra de camino hacia el asteroide Vesta y al planeta enano Ceres. Actualmente es investigador Ramón y Cajal en el Instituto de Astrofísica de Andalucía.
Pablo Santos es investigador posdoctoral en el departamento de Sistema Solar del IAA-CSIC. Científico planetario experto en Sistema Solar y, en especial, en la caracterización física y el estudio de las propiedades rotacionales de cuerpos menores del Sistema Solar (fundamentalmente objetos transneptunianos y centauros) a partir de fotometría en el óptico, el infrarrojo cercano y el térmico. También ha trabajado en el estudio de cometas, asteroides, impactos en la luna, meteoroides y ocultaciones de estrellas por objetos transneptunianos.
Ambos investigadores han tenido, durante los últimos años, la oportunidad única de trabajar con datos del Observatorio Espacial Herschel dentro del proyecto TNOs are Cool, que ha observado objetos transneptunianos y centauros durante casi cuatrocientas horas.