El final de las obras de rehabilitación del Palacio de Dar al-Horra, un inmueble del siglo XV que fue residencia de la madre de Boabdil, permitirá su uso turístico el próximo octubre y se sumará así a la ruta monumental ‘Dobla de oro’ organizada por el Patronato de la Alhambra. El Servicio de Conservación de la Alhambra inició las obras de rehabilitación en octubre del pasado año en una actuación de emergencia con una inversión cercana a los 400.000 euros.
La directora del Patronato de la Alhambra, María del Mar Villafranca, y la delegada del Gobierno andaluz en Granada, Sandra García, han anunciado hoy durante una visita a las obras que el monumento se sumará al proyecto ‘Dobla de oro’ en octubre en una apuesta por unir el monumento alhambreño con otros inmuebles del barrio del Albaicín.
La primera fase de la restauración del palacio se ha centrado en las cubiertas, grietas, techos afectados por deformaciones y roturas, para frenar el deterioro que amenazaba a esta edificación nazarí que fue palacio de la madre de Boabdil.
El proyecto “Alhambra Dobla de Oro” incluye visitas a este palacio albaicinero y sumar la casa morisca Horno del Oro, el Bañuelo y el Corral del Carbón, que ofrecerá programación cultural estable durante todo el verano.
El Palacio de Dar al-Horra se construyó en el siglo XV sobre los restos de un palacio zirí y sigue la tipología de casa hispanomusulmana, con miradores en la planta alta, techos policromados y patio rectangular, y su nombre, ‘casa de la señora’ hacía alusión a Aixa, madre de Boabdil, que la habitó.
Villafranca ha adelantado que este monumento será objeto de un estudio de investigación de la Universidad de Granada liderado por la arabista y profesora Bárbara Boloix, que se centrará en la elaboración del seguimiento cronológico de la historia y evolución arquitectónica del edificio desde su fundación hasta la actualidad.
Boloix ha explicado que será un estudio multidisciplinar para conocer el valor artístico y arquitectónico del Palacio y recuperar sus restos epigráficos árabes, la mayor parte de valor coránico.
Tras la conquista de Granada por los Reyes Católicos en 1492, el edificio pasó por distintos propietarios hasta ser de titularidad estatal a principios del siglo XX.