Los vecinos de la urbanización Cármenes del Mar de La Herradura, en Almuñécar (Granada), han pedido a la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, que articule las ayudas necesarias para frenar los daños que sufren sus 400 viviendas después de que un juzgado haya decretado obras cautelares
La urbanización con 425 casas se vendió entre los años 2001 y 2005 por precios que rondaron los 100.000 euros y desde su construcción, la ladera de Cerro Gordo en la que se ubica ha sufrido corrimientos de tierra que han ocasionado el derrumbe de algunas de las casas, la clausura por riesgo de otras 15 y desperfectos graves en la mayoría de las viviendas.
Los vecinos denunciaron a nueve responsables de diseñar y construir las viviendas con graves daños, tras lo que el juzgado de Primera Instancia 12 de Granada ha ordenado como medida cautelar ejecutar obras de sostenimiento valoradas en 4,5 millones y el embargo de bienes de los demandados por valor de 3,6 millones de euros.
En un comunicado, los vecinos han solicitado a la delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, que “haga algo” para sumar ayuda a dichas medidas cautelares y evitar que en el largo proceso judicial previsto por la titular de Instrucción 12 los daños se agraven y sean irremediables.
El auto ha acordado las medidas, con una inversión de 4,5 millones de euros, para evitar que las viviendas se caigan y minimizar los daños en los viales, suministros y zonas comunes de la urbanización.
“La Delegación del Gobierno conoce perfectamente la situación que tenemos, con varias casas derrumbadas y otras que se agrietan y se vienen abajo. Sin embargo, esa misma administración que hace promesas no es capaz después de tomar decisiones que impidan que los daños sean irreversibles”, ha explicado el portavoz de los vecinos, Ignacio Martín.
Los vecinos han descrito sentirse “ninguneados y maltratados” por el Gobierno central y le han reprochado que el Ministerio de Hacienda haya concedido un préstamo de 4,7 millones a una promotora que construirá un hotel de siete estrellas en Almuñécar sin mostrar la misma celeridad para ayudar a los afectados.
Las 415 familias de Cármenes del Mar han pedido la implicación de todas las administraciones para evitar que continúe el deterioro de sus casas en una situación que califican de catastrófica.
Las medidas cautelares incluyen el mantenimiento de viales y accesos interiores y exteriores, el de abastecimientos básicos como electricidad, gas y agua y la sustitución de las redes subterráneas.
El auto ordena además mantener los equipamientos que contribuyan a la estabilización de la urbanización, como muros de contención y anclajes, la vigilancia y en su caso, eliminación de cualquier riesgo para personas, y la consolidación del terreno en el que se cimentan las viviendas.