La Fiscalía de Granada ha solicitado 16 años y medio de prisión para un hombre acusado de matar de quince puñaladas a su padre cuando medió para evitar que continuara propinando una paliza a su madre y que apuntó después con una catana a los agentes que acudieron a detenerlo.
Según el escrito del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Efe, los hechos comenzaron sobre las 12.50 horas del 21 de junio del año pasado en la vivienda familiar ubicada en Cenes de la Vega (Granada), momento en el que el acusado Antonio A.Q. comenzó una discusión con su madre.
El imputado propinó varios puñetazos y bofetones a su madre en la cara, lo que provocó que su padre de cerca de ochenta años mediara en la trifulca para evitar que continuara la agresión.
Antonio cogió entonces un cuchillo de 17,5 centímetros de hoja y “con clara intención de acabar con la vida de su padre”, se abalanzó sobre él y comenzó a darle cuchilladas por diversas partes del cuerpo mientras el progenitor se desplazaba hasta la calle para pedir ayuda.
El anciano recibió quince puñaladas en la cabeza, la cara, el cuello, el tórax, el antebrazo y el abdomen, y murió varias horas después en un hospital granadino por una de las heridas que le afectó al pulmón.
Cuando la Guardia Civil se personó en el domicilio, el acusado apuntó con una catana a uno de los agentes para evitar el arresto aunque fue derribado en una maniobra en la que el guardia se lesionó el hombro.
Antonio, en prisión desde el día de los hechos, está acusado de los delitos de violencia familiar, un homicidio con el agravante de parentesco, resistencia a la autoridad y lesiones.
La Fiscalía ha solicitado diez meses de prisión por la violencia familiar y quince años de cárcel por el homicidio de su padre, a lo que suma la prohibición de acercarse o comunicarse con su madre durante veinte años.
El acusado, que será juzgado por estos hechos desde el próximo 22 de septiembre en la Sala Primera de la Audiencia de Granada, se enfrentará además a la petición de otros ocho meses de prisión por intentar impedir su arresto y al pago de una multa de 180 euros por las lesiones ocasionadas al agente.