El sector de la hostelería de Granada ha iniciado con una concentración ante la Patronal un calendario de protestas previo a las cuatro jornadas de huelga convocadas para los días 29 de agosto y 4, 10 y 11 de septiembre y que coincidirán con temporada alta y el mundial de baloncesto, con sede en la ciudad.
Delegados sindicales del sector se han concentrado hoy ante la sede de la Federación de Hostelería de Granada para exigir a la Patronal una negociación justa del convenio colectivo que afecta a 15.000 personas, convocadas a paros totales durante cuatro jornadas.
El sector mantiene la convocatoria de cuatro jornadas de huelga tras una reunión en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales (Sercla) que terminó sin acuerdos el pasado mes de julio, paros que coincidirán con la temporada alta y la celebración en la ciudad del Mundial de Baloncesto,
Los representantes sindicales han lamentado la “obcecación” de la Patronal y la falta de acuerdos para suscribir un nuevo convenio laboral frente a la actitud de otras provincias como Málaga y Huelva que ya han pactado sus nuevos convenios colectivos.
El responsable de Hostelería de UGT Granada, Francisco Jiménez, ha subrayado que el sector ha ofrecido reducir el tiempo de formación, rebajar y congelar las subidas salariales o perder días de vacaciones sin que la Patronal las haya considerado.
Jiménez ha recordado que las cifras turísticas de este año representan las mejores del último lustro, por lo que considera que la Patronal no puede argumentar sus rebajas salariales y laborales más allá de una “desmesurada ansia” de aumentar sus ganancias.
UGT y CCOO han pedido responsabilidad real al empresariado para alcanzar un acuerdo “sensato” que evite las cuatro jornadas de huelga y han reiterado su disposición a negociar siempre que se mantengan unas condiciones laborales mínimas para los 15.000 afectados.
La responsable de Hostelería de CCOO, Elvira Martínez, ha calificado de desproporcionadas las peticiones de rebajas salariales y de derechos de la Patronal, a lo que ha sumado como lastre las prácticas abusivas de las empresas.
La responsable de CCOO ha denunciado las abusivas cargas de trabajo, que implican un empeoramiento de las condiciones laborales y el incremento de la economía sumergida, que repercute además en la atención al cliente.