La soprano Mariola Cantarero, que hoy ha presentado su nuevo trabajo grabado en directo en el marco del Festival Internacional de Música y Danza de Granada, ha asegurado que poder interpretar la música de Ángel Barrios en la Alhambra ha supuesto “la culminación de un sueño” en su carrera profesional.
La artista granadina, que el pasado junio ofreció un recital homenaje al también compositor granadino en el 50 aniversario de su muerte, ha expresado en rueda de prensa la “gran satisfacción” que le ha supuesto este nuevo trabajo, que será distribuido en una treintena de países.
Grabado en directo en el monumento nazarí, “Canciones en la Alhambra” une obras de Ángel con piezas de los grandes maestros franceses y otras de la copla española, con Rubén Fernández Aguirre al piano.
“Ésta es la culminación de muchas cosas en mi vida profesional”, ha sentenciado la soprano, quien se ha mostrado “orgullosa” de su tierra y de poder haber ofrecido el concierto en “una joya” como la Alhambra.
El trabajo, presentado en el Centro de Documentación Musical de Andalucía, recoge seis canciones compuestas por Barrios en torno a 1960, así como composiciones de otros músicos de la época.
Según la delegada en Granada de la Consejería de Cultura, Ana Gámez, se trata de una forma de aunar a dos granadinos “lejanos en el tiempo” pero unidos “por el respeto a la música con mayúsculas y por la inspiración del monumento nazarí”.
Con la edición del nuevo trabajo musical de Cantarero, continúa el homenaje que se rinde al compositor granadino, cuya labor fue esencial en la dignificación de la música popular, ya que dio a conocer la tradición y la música española en todo el mundo.
Residente insigne de la Alhambra y heredero de la tradición musical y de la recuperación del folclore popular, Barrios fue amigo de Falla y Federico García Lorca, con lo que organizó el concurso de cante de 1922.
Por su parte, Cantarero, Medalla de Andalucía en 2011, es una de las sopranos con más proyección en la escena internacional.
Nacida en Granada en 1978 en el seno de una familia sin antecedentes en la música, estudió en el Conservatorio de su ciudad natal y, posteriormente, con el catedrático de canto Carlos Hacar y la cantante Ruthilde Böesch.