Un grupo organizado dedicado al tráfico de drogas ha sido desarticulado en un operación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Nacional en las provincias de Málaga y Granada, que ha logrado la incautación de 2,8 toneladas de hachís y la detención de cinco supuestos narcotraficantes.
Un vecino de Marbella alertó a la Policía de que varios hombres se encontraban desembarcando fardos en una playa de esta localidad malagueña, lo que dio origen a las investigaciones, que han finalizado con el arresto de cinco hombres de edades comprendidas entre los 28 y 40 años, según ha informado hoy el Ministerio del Interior en una nota.
La operación ha sido fruto de dos actuaciones en principio diferenciadas de ambos cuerpos policiales, cuyas investigaciones convergieron.
La primera actuación supuso la intervención por la Policía Nacional de un alijo de 24 fardos de hachís en una playa de Marbella el pasado día 8 de julio, a partir de la cual se inició la denominada operación “Edgar”.
La segunda actuación tuvo lugar al día siguiente, cuando la Guardia Civil interceptó un vehículo en la autovía A-92 a su paso por la provincia de Granada, cargado con 450 kilos de hachís, y detuvo a una persona, tras lo que se abrió otra operación denominada “Turán”.
En la primera operación, en la playa Alicate de Marbella, los agentes encontraron a varias personas que alijaban los fardos de hachís desde una embarcación de grandes dimensiones.
Al verse sorprendidos, se dieron a la fuga, unos en un vehículo y otros corriendo hasta una zona cercana de matorrales y maleza.
En un primer momento, los agentes pudieron detener a una de estas personas cuando trataba de huir y, horas más tarde, a otras dos que se encontraban escondidas en las inmediaciones y que también habrían participado en el desembarco.
En esta fase fueron intervenidos en la playa diez fardos de hachís.
Al día siguiente los agentes localizaron y detuvieron en la provincia de Granada al ocupante de uno de los vehículos que se había dado a la fuga, en el que se encontraron catorce fardos de hachís.
Las investigaciones conjuntas han permitido a los agentes identificar a otro de los implicados y averiguar que éste desempeñaba un papel importante dentro del grupo.
Este hombre fue detenido en su domicilio, en el que hallaron 63 fardos más de hachís, casi 15.000 euros en efectivo, once teléfonos móviles y dos vehículos.