El hombre acusado de matar de quince puñaladas a su padre cuando éste medió para evitar que continuara propinando una paliza a su madre ha aceptado hoy once años y 45 días de prisión, de los 16 años que solicitó inicialmente la Fiscalía.
El acusado de un delito de homicidio con la agravante de parentesco por matar a su padre octogenario ha reconocido hoy los hechos y ha aceptado la rebaja en la petición de pena acordada por las partes.
El acusado, Antonio A.Q., ha admitido la autoría de los hechos, que tuvieron lugar el 21 de junio del año pasado en la vivienda familiar ubicada en Cenes de la Vega, por lo que no se ha constituido el jurado popular que iba a enjuiciarlo hasta el próximo viernes en la Sala Primera de la Audiencia de Granada.
Los hechos sucedieron cuando el imputado comenzó una discusión con su madre, a la que propinó varios puñetazos y bofetones en la cara, lo que provocó que su padre mediara para evitar que continuara la agresión.
El acusado cogió entonces un cuchillo de 17,5 centímetros de hoja y “con clara intención de acabar con la vida de su padre”, según la Fiscalía, se abalanzó sobre él y comenzó a la agresión.
La víctima recibió quince puñaladas en la cabeza, la cara, el cuello, el tórax, el antebrazo y el abdomen, y murió varias horas después en un hospital granadino por una de las heridas que le afectó al pulmón.
Cuando la Guardia Civil se personó en el domicilio, el acusado amenazó con una catana a uno de los agentes para evitar ser arrestado, aunque fue derribado en una maniobra en la que el guardia se lesionó el hombro.
Fuentes de la Fiscalía Provincial han detallado a Efe que un acuerdo entre las partes ha permitido rebajar la petición de condena de 16 años y medio de cárcel a 11 años y 45 días de prisión.
El Ministerio Público ha modificado además la solicitud de indemnización para sus familiares, que ha valorado en 80.000 euros para la viuda de la víctima y la misma cantidad para la hermana del acusado, a lo que ha sumado 900 euros para el agente herido y el pago de 9.055 euros en gastos al hospital San Cecilio de Granada.
La defensa del acusado había solicitado el cumplimiento de nueve años de cárcel.