El exquisito acompañamiento musical con la Banda de Cornetas y Tambores Tres Caídas de Granada fue un aliciente más para hacer de la tarde del domingo un momento histórico que perdurará por siempre en la memoria cofrade paduleña.
Padul vivió ayer una intensa jornada gracias a los actos programados por la Hermandad de Penitencia y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Padre Jesús de la Flagelación con motivo del centenario de la llegada a Padul de la imagen de su titular.
Por la mañana tuvo lugar una misa rociera en el patio del antiguo convento y posteriormente se elaboró una paella solidaria que degustaron seiscientos comensales y cuyo beneficios irán destinados a Cáritas Diocesana.
Ya por la tarde, a partir de las 18:00 h, un inmenso gentío se hizo hueco el entorno de la Casa de Hermandad en la calle Horno bajo el pretil de la Iglesia, para contemplar la salida extraordinaria programada por la Hermandad.
Precedían al paso dos filas de fieles y representación de todas las cofradías paduleñas y varias de Granada y otros municipios. Pegados al paso, los acólitos turiferarios y el cuerpo de ciriales llenaban la tarde de aromas y colores cofrades. El cuerpo de costaleros y costaleras portaron magistralmente el paso plateado y exornado con flor blanca sobre el que procesionó la imagen de Jesús acompañado por los dos sayones con los que se conforma el paso de misterio. Detrás sonaron las mejores marchas de Semana Santa interpretadas por los músicos de la Banda de cornetas y tambores “Tres Caídas de Granada”, sonidos del Realejo que engrandecieron aún más si cabe esta histórica jornada para el mundo cofrade paduleño.