La iglesia del monasterio de las Comendadoras de Santiago acogió en la tarde del jueves la presentación del nuevo palio de la Virgen de la Amargura. Doce varales sustentaban las caídas y el techo de un palio finalizado después de diez años de trabajo.
Ubicado sobre su parihuela en el centro de la nave principal del templo, el montaje permitía ser rodeado por los asistentes, los cuales descubrieron todos y cada uno de los detalles de este gran estreno cofrade. Un buen número de cofrades se dieron cita en el barrio del Realejo para acompañar a la hermandad de la Oración en el Huerto en esta ‘puesta de largo’. Con la iglesia completamente llena el acto se inició con unas palabras del hermano mayor, Manuel Cañavate, quien resumió emocionado todo el trabajo que ha tenido que desarrollar la hermandad hasta la llegada de este día de presentación. Seguidamente, el cofrade de esta corporación Mariano Sánchez Pantoja tomó la palabra para describir las características y fundamentos artísticos del bordado del palio. Por último se entonó el himno de la coronación dedicado a la titular mariana, todo ello observado desde la clausura por las madres comendadoras del monasterio. Tras la celosía del templo fueron testigos de la expectación que despertó esta convocatoria.
El proyecto se inició con la creación de un diseño con referencias a la historia del arte del siglo XVIII realizado por Juan Díaz Losada, al que le siguió el encargo del bordado a las madres comendadoras y se completó con la fase de orfebrería que se dejó en manos de Alberto Quirós. Todo este conjunto artesanal ha llenado de ilusión a unos cofrades que el año que viene verán a su titular mariana coronada canónicamente bajo este palio. Las puertas de la iglesia del monasterio permanecerán abiertas para permitir las visitas los días 21 de noviembre de 19h a 21h, el sábado 22 de 12h a 14h y de 19 a 21h y el domingo 23 de 12h a 14h. Todos los cofrades e interesados tienen una oportunidad única de contemplar en detalle los trabajos de bordado y orfebrería de este nuevo palio, de gran riqueza ornamental y calidad artística, que ya forma parte del patrimonio de la Semana Santa de Granada.