El hostelero Luis Oruezábal, fallecido accidentalmente el día de Nochevieja, tendrá en Granada un busto cerca de su restaurante Chikito, una calle o plaza y un premio que reconocerá los valores turísticos que siempre promovió.
Además dará nombre el certamen de tapas anual dado que siempre trabajó por dignificar la -en ocasiones- maltrecha tapa granadina. Así lo ha decidido la Federación de Hostelería reunida hoy con carácter extraordinario en el salón de plenos de Granada como ha dado a conocer, junto al alcalde, su presidente Trinitario Betoret.
Escucha a Trinitairo Betoret: