La localidad granadina de Lojilla, pedanía del municipio de Montefrío, ha celebrado este fin de semana su ancestral ‘Fiesta de los Tontos’, una celebración entroncada en los famosos Verdiales de Málaga que se recuperó en 2010 tras casi dos décadas sin celebrarse.
Como particular homenaje a su patrón, San Sebastián, durante varias horas los ‘Tontos’, varios jóvenes disfrazados con atuendos de colores y cencerros colgados por todo el cuerpo, volvieron a saltar por las calles de Lojilla, pidiendo dinero a los transeúntes para dejarles en paz. De lo contrario, no cesarán de brincar, gritar y molestarles y de ahí su apodo.
Tradicionalmente, los ‘Tontos’ pedían esta limosna por los cortijos de Lojilla para poder sufragar los gastos de la feria de San Sebastián, y los vecinos también les obsequiaban con tortas de aceite y melones.
El origen de esta fiesta es desconocido, si bien antropológicamente están entroncadas con la fiesta de los Verdiales de Málaga, cuyo atuendo (con capas, sombreros y cintas de colores) es muy similar, informa el Ayuntamiento de Montefrío en una nota.
La jornada comenzó con la tradicional misa en honor a San Sebastián celebrada en la Ermita de Lojilla, un templo recientemente restaurado. Por la tarde, los ‘Tontos’ hicieron su aparición por las calles de la pedanía, incordiando a todo aquel que se interponía en su camino y llamando una a una a todas las puertas de las casas.
El día finalizó con una gran comida gratuita para todos los asistentes, en la que no faltaron el lomo con patatas y chorizos, la morcilla y el chocolate con los típicos bollos de manteca.
El teniente de alcalde de Montefrío, Agustín García, asistió a la fiesta de los Tontos, y afirmó sentirse “muy orgulloso de que los vecinos de Lojilla y el Ayuntamiento hayan sido capaces de recuperar esta fiesta centenaria, una tradición muy auténtica como ya quedan pocas en Andalucía”.