Más de 200 profesionales se dan cita en Granada, desde este miércoles y hasta el día 13, en la XI edición del Congreso Nacional de Radiología Intervencionista de Enfermería para unificar criterios de actuación en el desarrollo de la actividad enfermera en esta especialidad.
En concreto, en los distintos procedimientos diagnósticos y terapéuticos no invasivos para el tratamiento de patologías cerebrales y vasculares, como aneurismas intracraneales o malformaciones.
El Complejo Hospitalario Universitario de Granada cuenta con dos salas de Radiología intervencionista que funcionan como quirófanos.
En ellas desarrolla su labor cuatro facultativos, cuatro enfermeros y un auxiliar de enfermería, que realizan más de 1.500 tratamientos al año, tanto a pacientes con patología cerebrovascular como de patología vascular no neurorradiológica.
La Radiología Intervencionista permite el tratamiento mínimamente invasivo de múltiples patologías vasculares cerebrales que antes requerían de una compleja intervención quirúrgica abierta y que hoy se resuelven mediante el uso de catéteres que se introducen a través de una pequeña punción en la arteria femoral; en muchos casos con anestesia local y con tiempos cortos de hospitalización.
Se tratan patologías complejas como aneurismas cerebrales, malformaciones arteriovenosas cerebrales y procedimientos de revascularización cerebral tanto de forma programada como para el tratamiento del ictus en agudo, entre otros.
En el ámbito de la radiología intervencionista no neurorradiológica, el abanico de la patología tratada es muy amplio, siendo los principales servicios de referencia los de Neurología, Hematología, Oncología y Hepatología.
El centro granadino es referente en el tratamiento pre y post-transplante hepático y cirugía vascular, sobre todo en patología isquémica aguda y crónica de miembros inferiores.
Esta unidad clínica dispone de un angiógrafo digital biplano, dotado de detectores planos,- la tecnología más moderna para la captación de imágenes radiológicas digitales-, y con capacidad de producir imágenes tridimensionales que facilitan enormemente el diagnóstico y el tratamiento de pacientes.
Dicha instalación está especialmente diseñada para procedimientos diagnósticos y terapéuticos de neurorradióloga intervencionista.
Está dotada así mismo de un novedoso sistema de luz y sonido para reducir la ansiedad del paciente y mejorar la ergonomía de los profesionales.