El Arzobispado de Granada ha emitido un decreto por el cual prohíbe “toda actividad” a la Cofradía de la Veracruz de Motril, incluida la procesión en Semana Santa, casi un año después de que registrara un accidente con un Cristo que hirió a dos costaleros al caer sobre ellos.
La Agrupación de Hermandades y Cofradías de Motril ha informado de que en el decreto emitido por el Arzobispado y firmado por el vicario episcopal, Antonio Valverde, se señala que las “circunstancias especiales que envuelven a la Muy Antigua Archicofradía” les ha obligado a determinar esta prohibición, que no significa la disolución de la misma ni impide la vuelta a la actividad en años posteriores.
El presidente de la gestora de la agrupación motrileña, Antonio Hernández, ha contado a Europa Press que la hermana mayor de esta archicofradía presentó días atrás su dimisión “por motivos personales”. Abandonó su puesto, asimismo, la mitad de la junta de gobierno, por lo que la gestión de la cofradía se ha visto en peligro.
El secretario en funciones de la Veracruz, según ha asegurado Hernández, se ha puesto en contacto con la agrupación para asegurarles que, una vez finalice la Semana Santa, contactará con la Curia para concretar las actuaciones pertinentes y así retomar la actividad cofrade de cara al próximo año.
No es el primer año en que esta cofradía sufre problemas. En la estación de penitencia de 2014, el Cristo –un crucificado– cayó hacia atrás hiriendo a dos de los costaleros de la cuadrilla de refresco.
Con esta decisión, las calles motrileñas no vivirán la estación de penitencia de la Veracruz y la Virgen del Valle en la tarde del Viernes Santo. Se queda en ‘stand by’ también la tradicional procesión infantil de la mañana del Domingo de Resurrección sin la salida del Dulce Nombre de Jesús.