La Universidad, la Diputación y el Ayuntamiento de Granada han suscrito hoy un convenio institucional para impulsar un programa de intervención psicosocial con niños y madres víctimas de violencia, una iniciativa pionera en España que planteará pautas de tratamiento e incluirá una investigación.
Este programa, presentado por el rector, Francisco González Lodeiro, el presidente de Diputación, Sebastián Pérez, y el alcalde, José Torres Hurtado, prevé que los servicios sociales de las administraciones participantes deriven a niños de entre 9 y 12 años y sus madres a la Facultad de Psicología y al Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento.
El objetivo es que las mujeres víctimas de violencia de género y sus hijos puedan identificar creencias erróneas acerca del maltrato y del uso de la violencia a través de una intervención fundamentalmente grupal.
También podrán llevar a cabo sesiones individuales tanto durante la fase de evaluación como, de manera puntual, si se estima conveniente o es expresamente solicitado por parte de algunos usuarios.
Tras la fase de preparación y evaluación, se celebrará una intervención grupal con niños y otra con las madres y, en caso de que se considere de interés, se constituirá un grupo mixto.
El programa, de acuerdo al convenio suscrito entre las instituciones, se desarrollará en unas dieciséis sesiones de trabajo, con una duración de unas dos horas semanales aproximadamente cada una de ellas a lo largo de un semestre.
Las dinámicas, según ha explicado el concejal de Familia y Bienestar Social, Fernando Egea, trabajarán con grupos de entre 7 y 9 niños y madres de manera simultánea.
Este programa de tratamiento será puesto en marcha por profesionales de la psicología especializados en la materia y coordinados por Francisca Expósito, catedrática de Psicología Social de la Universidad de Granada.
En cuanto a la vertiente de investigación, la Universidad analizará las causas de la violencia de género y propondrá posibles estrategias para reducirla desde una perspectiva psicosocial.
De esta forma pretenden identificarse las actitudes hacia la violencia de género y la relación entre ellas y los indicadores de sexismo.
Se estudiará en qué medida se relacionan las actitudes hacia la violencia de género de las mujeres víctimas con la propia vivencia de esta violencia, se identificarán las estrategias y estilos de afrontamiento que exhiben las mujeres víctimas para abordar situaciones de conflicto en la familia y los efectos en los hijos.
Para ello, se prestará especial atención al papel que desempeña la madre en el proceso de “aceptación o minimización” de la violencia de la que es víctima y se aportará información “precisa y rigurosa” para la planificación de programas de tratamiento e intervención.
Tanto la Diputación como el Ayuntamiento sufragarán el material gráfico y didáctico que utilizarán los niños y sus madres durante el desarrollo del programa, cuyo convenio tiene una duración de un año aunque se pretende darle continuidad en el futuro, han informado hoy en rueda de prensa sus impulsores.