La plaza del Pilar de Zujaira volverá a el escenario del acto de homenaje a los once zujaireños asesinados en el campo de exterminio de Mauthausen.
El próximo lunes 29 de junio el monolito, levantado en la plaza del Pilar de Zujaira en recuerdo a los once zujaireños asesinados en el campo de exterminio de Mauthausen, volverá a ser testigo del acto homenaje a la Memoria Histórica y al recuerdo, que se viene celebrando desde hace tres décadas en la localidad.
El acto organizado por el Ayuntamiento, comenzará a las nueve de la noche y contará con la presencia, entre otros, de la delegada del gobierno de la Junta de Andalucía, Sandra García, el alcalde de Pinos Puente, Enrique Medina, la alcaldesa pedánea, Remedios Jiménez, la diputada Olga Manzano. También asistirán al acto el presidente y el vicepresidente de la Asociación granadina para la Recuperación de la Memoria Histórica, Rafael Gil Bracero y Ernesto Rosales.
Durante la Guerra Civil española, debido a sus ideales políticos, numerosos vecinos del municipio se vieron obligados a huir de España para salvar su vida y buscar refugio en países vecinos. Este hecho, tan sumamente doloroso, se tornó aún más trágico porque muchos de ellos, tras cruzar la frontera francesa, fueron internados en campos de reagrupamiento, debiendo soportar un trato cruel y unas condiciones de vida pésimas por parte de las autoridades francesas.
Tras el estallido de la II Guerra Mundial muchos españoles fueron obligados a combatir en las filas del ejército francés, enviados al frente en escuadrones de choque, siendo muchos de ellos capturados por los nazis.
Los nazis preguntaron a las autoridades españolas que debían hacer con los “rojos españoles capturados”, para ver si los extraditaban a España. Pero los campos de concentración españoles estaban a rebosar de presos por lo que, Ramón Serrano Suñer, ministro de asuntos exteriores, amigo personal de Heinrich Himmler, contestó rechazando la extradición, alegando para ello que no se trataba de españoles, sino de “apátridas indeseables”, por lo que la Gestapo se hizo cargo de ellos.
Es de este modo como once vecinos, republicanos de Zujaira, fueron conducidos a Mauthausen, que junto con Gusen fueron los dos únicos campos de exterminio de toda Europa etiquetados como campos de “Grado III”, lo que significa que eran los campos más duros para los “enemigos políticos incorregibles del Reich”.
Tal y como explica la alcaldesa de Zujaira, Remedios Jiménez “cuesta imaginar el horror vivido en aquellas instalaciones pero aún duele más el hecho de saber que todo parte del papel clave que el régimen franquista surgido del golpe militar del 18 de julio de 1936, desempeñó en que después de la captura de varios miles de republicanos españoles, además de ser considerados “apátridas” y pese a ser prisioneros de guerra, no se les aplicase el estatuto correspondiente según la Convención de Ginebra, sino que fuesen considerados “combatientes rojos españoles (rotspanienkämpfer)”, tratándoseles en calidad de prisioneros políticos a los que había que aniquilar”
Los once zujaireños objeto de este homenaje son: Manuel Reina Moya, Pedro Crespo Trujillo, Juan Gálvez Cervera, Rogelio García Alcaraz, Francisco Marfil Crespo, Juan Amigo Nuñez, Rafael Ávila Jiménez, José Crespo Jiménez, Ángel Reina Moya, Antonio Reina Moya y Francisco García Alcaraz, único superviviente de Mauthausen, ya fallecido, y promotor del monolito.
Para el alcalde de Pinos Puente, Enrique Medina, “la lucha contra los crímenes que vulneran las libertades y derechos humanos son una exigencia democrática elemental y un deber para con las futuras generaciones. Este es nuestro granito de arena para que estos crímenes no queden impunes”.