FACUA elabora un decálogo de consejos para los usuarios de piscinas. Es fundamental que los usuarios de piscinas conozcan sus derechos en cuanto a las medidas de seguridad, higiene y atención de reclamaciones de estos establecimientos.
Como parte de su campaña de información y asesoramiento a los consumidores sobre sus derechos en vacaciones, la Asociación de Consumidores y Usuarios en Acción de Granada-FACUA ha elaborado un decálogo con recomendaciones y consejos para los usuarios de piscinas de uso colectivo.
El uso de estos lugares de ocio se regula por un Reglamento del año 1999 (publicado en el BOJA nº 36 de 1999. Disposiciones Junta de Andalucía, Decreto 23/1999, de 23 de febrero, por el que se aprueba el Reglamento Sanitario de las Piscinas de Uso Colectivo), que ha quedado en parte obsoleto pues no se introdujeron medidas concretas encaminadas a la eliminación de barreras arquitectónicas y la adaptación funcional de las mismas. Este reglamento tampoco contempla en detalle cómo deben ser instalaciones básicas en las piscinas, tales como los usuarios, ya no se hace referencia a su carácter individual, su capacidad o equipamiento. Tampoco se menciona en la normativa la disposición de taquillas para guardar los objetos personales ni guardarropa común y vigilado.
El usuario debe saber, que cada piscina debe tener obligatoriamente un libro de registro y control de la calidad del agua, donde deberán aparecer los datos de identificación y los registros analíticos de la calidad del agua debidamente cumplimentados. En este libro tienen que aparecer los parámetros de concentración de desinfectante, color, olor y transparencia del agua de cada día. En las piscinas cubiertas además deberán constar los de control de la temperatura ambiental. Cada piscina deberá tener expuesto de forma visible un cartel del aforo permitido de la instalación.
FACUA Granada recuerda que dentro de la piscina o vaso recreativo o de chapoteo el espacio disponible para cada usuario, deberá ser de dos metros cuadrados de superficie de agua y tres en el caso de las piscinas cubiertas.
En cuanto a los aseos, su limpieza deberá efectuarse tan frecuentemente como sea necesario para evitar riesgos sanitarios. El Decreto establece que deben limpiarse al menos una vez al día y que se debe disponer en todo momento de papel higiénico, toallas monouso, dosificador de jabón y agua corriente aunque no se indica la necesidad de otro equipamiento.
Finalmente este seria el “Decálogo de recomendaciones para los usuarios de piscinas”:
1. La piscina y su agua, los aseos, vestuarios y el resto de las instalaciones, deben estar en perfectas condiciones higiénico-sanitarias. Los vestuarios y aseos deben estar bien ventilados y ser de material impermeable, liso y no resbaladizo, con paredes y suelos redondeados que permitan un completo y fácil lavado.
2. Los mareos y cortes de digestión son relativamente frecuentes en las piscinas, por lo que es conveniente esperar un tiempo después de comer y no cometer imprudencias que pudieran poner en peligro nuestra salud (un baño frío repentino después de un ejercicio violento o después de un acaloramiento).
3. Las piscinas públicas deben disponer de un botiquín de urgencia. Asimismo, debe haber una enfermería en las de aforo igual o superior a 450 personas y al menos un socorrista en las que tengan una superficie de agua de entre 200 y 500 metros cuadrados. A partir de esta superficie habrá un socorrista más por cada 500 metros cuadrados.
4. Debe haber al menos tantos salvavidas como escalerillas, nunca menos de dos. Deberán situarse en lugar visible y de fácil acceso para los bañistas.
5. No es conveniente entrar en la piscina si se padece o se ha padecido recientemente alguna enfermedad infecciosa. Tampoco deben introducirse en el agua personas con heridas, tiritas, infecciones en la boca, pelo sucio y, en general, cualquier infección cutánea. Hay que ducharse antes del baño.
6. Está prohibida la entrada al recinto de personas calzadas o en ropa de calle. Conviene utilizar unas chanclas playeras o calzado, ya que muchos de los hongos y herpes contraídos en los pies suelen venir por ir descalzos sobre el suelo sucio.
7. Es necesario respetar tanto las medidas de seguridad dictadas para el uso de los vasos de baño, toboganes y atracciones de las piscinas, como en lo que se refiere a las limitaciones por edad en el uso de las mismas.
8. No deben consumirse alimentos en el recinto de la piscina ni se deben arrojar desperdicios o introducir recipientes de cristal o de material que puedan suponer riesgos para los usuarios.
9. Si va acompañado de niños, présteles atención para evitar riesgos e instrúyales en las diferentes medidas de seguridad necesarias para el uso de piscinas, toboganes y trampolines a fin de evitar accidentes.
10. Si sufre algún problema y no le atienden correctamente, solicite una hoja de reclamaciones y, si en el plazo de diez días no obtiene respuesta o ésta no es satisfactoria, acuda a FACUA Granada, donde le asesorarán sobre sus derechos y la tramitación de su denuncia.