La Diputación Provincial tendrá que devolver por lo menos el primero de los recibos del conocido como “tasazo” de la basura puesto en marcha por el anterior gobierno del PP. Y eso después de la sentencia que anula la primera regulación de la nueva tasa. Lo más curioso es que ayer mismo el Ayuntamiento de Granada, gobernado por el PP, pidió a la Diputación, hasta ayer gobernada por el PP, que devuelva el dinero cobrado de más. PSOE e Izquierda Unida pidieron también la devolución y criticaron al equipo de gobierno.
El concejal de Economía y Hacienda en el Ayuntamiento de Granada, Francisco Ledesma, ha pedido a la Diputación provincial que acate el fallo de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) sobre la ordenanza fiscal de 2013 por la que se regula la tasa de Tratamiento de Residuos y ha solicitado la devolución de las cantidades que los ciudadanos de Granada hayan pagado por este concepto.
Ledesma ha asegurado que el Ayuntamiento de Granada, “en contra de lo que mantienen el PSOE e Izquierda Unida”, se ha “limitado a cumplir con sus obligaciones” por lo que ha pedido que “dejen de confundir a los ciudadanos con mentiras” ya que “una vez que el Consorcio de Tratamiento de Residuos se liquidó, la gestión del servicio de tratamiento de residuos fue asumido por la Diputación de Granada, entidad que se encarga del cobro de la tasa”, ha precisado.
En este sentido, el concejal ha reiterado que el Ayuntamiento de Granada firmó el 29 de mayo de 2010 un convenio para la liquidación y pago de las cantidades pendientes del Consorcio Provincial de Tratamiento de Residuos sólidos Urbanos de Granada a través del cual cedía a Resur la cantidad que el Consorcio Provincial de Extinción le integraba al Ayuntamiento cada año.
Debido a este acuerdo, Granada pagó “de forma escrupulosa” su deuda con Resur, a razón de 1.360.000 euros anuales, siendo “uno de los pocos ayuntamiento de la provincia que está saldando su deuda”, ha especificado quien ha rogado a los portavoces de IU y del PSOE a que “abandonen la política de la confusión” y les ha recordado que, “no por mucho mentir, las cosas se convierten en verdad”.