Los vecinos de Huéscar notarán a partir de ahora un alivio en la carga impositiva que deben afrontar cada año. El consistorio oscense ha decidido modificar los tributos locales y entre otros impuestos ha regulado el IBI, conocido como ‘la contribución’, para compensarlo con la subida de los valores catastrales. La ordenanza fiscal que regula el el IBI ha sido modificada bajando este impuesto del 0,70% al 0,64%. Esta reducción aprobada tras los informes de intervención permite seguir con el cumplimiento del equilibrio presupuestario, algo en lo que insiste el alcalde del municipio, José García Giralte.
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Otro impuesto que se verá afectado es el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, más conocido como ‘Plusvalía’. La modificación de la cuota descenderá en más del 50% en todos los tramos de la escala.
Y por último, el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICO) será congelado y tendrá una ampliación para todas las viviendas de más de 50 años. De esta forma, se pretende incentivar la reforma de los edificios más antiguos y recuperar los barrios del municipio.