El pleno del Ayuntamiento de Armilla aprobó la propuesta del equipo de gobierno que supone una bajada generalizada de la ordenanza fiscal que regula el Impuesto de Bienes Inmuebles de Naturaleza Urbana” (IBI). El Ayuntamiento aprueba así una reducción del tipo del IBI para 2016, con el objetivo de “reducir la carga sobre la ciudadanía”. Se compensará con el incremento del tipo impositivo a las grandes empresas.
El concejal de Economía y Hacienda, Rafael Muñoz Criado, explica que “la modificación afecta al tipo de gravamen que depende del Ayuntamiento, bajándolo del 0,627% actual al 0,59%.” Dejando el tipo impositivo en uno de los más bajos en ciudades de más de 20.000 habitantes, y en el ámbito del área metropolitana, paliando en gran parte la subida del valor catastral aplicado por el Ministerio de Economía y Hacienda.
En su intervención, Muñoz Criado explicó que; “esta bajada del IBI se compensan con subidas en tipos diferenciados en función de sus usos, y que además, sobrepasen umbrales de valores catastrales altos, entre 400.000 euros y 1.000.000 euros; y que no afectaran a más del 10% de los inmuebles correspondientes a cada uso. Es decir, pagaran más los que más tienen, implantando los principios de progresividad fiscal, redistribución de la riqueza y justicia social en los impuestos municipales”.
Un tipo impositivo que una vez aprobado es uno de los más bajos del área metropolitana, una circunstancia que da gran valor a esta revisión del impuesto, y demuestra que desde las áreas de economía se pueden aplicar políticas de izquierdas reales.
La bajada que afecta al impuesto más importante del Ayuntamiento, permite dar un respiro económico a los vecinos y vecinas, además de, en palabras del edil de economía, continuar con el cumplimiento de los planes de ajuste y equilibrio presupuestario, que desde 2012, encorsetan la economía municipal del ayuntamiento. De esta forma, la famosa “contribución”, afectara a los inmuebles de naturaleza urbana, las viviendas y residencia de la ciudadanía, que verán de este modo reducido el tipo impositivo en su recibo hasta el 0,59%. Este nuevo “tipo impositivo en el IBI” cuenta con los informes y valoración positiva de la intervención municipal.
Rafael Muñoz ha indicado que “desde el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Armilla, se quiere aliviar la presión fiscal que sufren las familias ante las subidas periódicas que se están aplicando desde el gobierno en los valores catastrales, un hecho con claro afán recaudatorio que afecta incrementando los recibos”. Esta bajada del IBI además de cumplir compromisos electorales, viene acompañada de la firme intención de mantener las múltiples actividades y la prestación eficaz de los servicios que presta el ayuntamiento de Armilla, el consistorio más importante del área metropolitana, aumentando su grado de eficiencia