La Casa Ágreda, un edificio del siglo XVI situado en el barrio del Albaicín de Granada, se convertirá en la sede en España de la Federación de Agencias Internacionales para el Desarrollo (AIDE) después de su rehabilitación por parte de esta misma organización que, con un presupuesto inicial de 5 millones de euros, se prevé esté finalizada dentro de 36 meses con el fin de albergar proyectos sociales y culturales.
Así lo ha señalado en rueda de prensa el alcalde de Granada, José Torres Hurtado, quien ha recordado que el Ayuntamiento adjudicó el derecho de superficie de este inmueble catalogado para “recuperar su estado original” y ha destacado “la importancia” de que Granada sea sede de este organismo internacional que cuenta con su sede principal en París y que tiene presencia en once países y trabaja con otros trece más: “Ya está toda la documentación acordada y firmada a la espera sólo de las escrituras”, ha explicado el regidor granadino destacando que AIDE haya visto a la ciudad como “lugar de intercambio y convivencia en armonía”
El arquitecto encargado de hacer el anteproyecto que se presentó al concurso de licitación y que “en cuanto estén todos los permisos” se ejecutará, Eduardo Ortiz, ha expuesto que el edificio consta de tres partes, de propiedad municipal que dan a la calle Lavadero de Santa Inés y San Juan de los Reyes, “donde está la fachada principal en un estado grave de deterioro”.
Tras la reforma se prevé que en la planta baja se construya el lavadero, la recepción, la portería, y la zona del centro más abierta la ciudad. La zona palaciega de la primera planta se sitúa en la primera planta y, al tratarse de tres espacios diferenciados, es susceptible de rehabilitarse en tres fases. Aquí irá la biblioteca y archivo, la zona de comunicación y administrativa. En el segundo patio se situará, asimismo, la cocina. Las dependencias se completarán con aulas, un comedor, habitaciones individuales y colectivas así como despachos, salas de reuniones y oficinas.
Las obras deberán comenzar por la parte monumental cuya rehabilitación debe estar finalizada en quince meses y continuarán los trabajos hasta completar los 36 meses de periodo de ejecución, según ha explicado el arquitecto granadino quien ha asegurado que en “siete meses” se podrá dar inicio a una obra que alberga una actuación de 3.000 metros cuadrados.
La inserción laboral de inmigrantes en situación de exclusión, el cuidado de víctimas de violencia de género así como la creación de talleres y formación para las personas que viven situaciones sociales difíciles son algunas de las labores que se llevarán a cabo en la Casa Ágreda, que se dotará, además, de contenido cultural.